Ensalada de patata

A medio camino entre la ensalada campera y la ensaladilla rusa de patatas y encurtidos se encuentra esta ensalada de patata que hoy traigo. Realmente su factura es más sencilla, ya que los ingredientes básicos son menos: patata, cebolla, huevo y mayonesa. Al objeto de darle más color y, por qué no, aumentar el sabor, he incluido otros ingredientes complementarios como pimiento rojo, aceitunas negras y cebollino. También podría haber utilizado zanahoria, pimiento verde u otras verduras. Pero no se trata de hacer una ensalada complicada, sino algo sencillo, alimenticio y fresco (para soportar los rigores estivales que estamos atravesando).

En casa solemos tener patatas cocidas al vapor (con su piel), de esas pequeñitas. En el frigorífico aguantan bien varios días (incluso una semana) y es una forma de disponer inmediatamente de un ingrediente básico para otro plato o de tener una guarnición menos calórica que unas patatas fritas. Lo mismo sucede con los huevos cocidos. En verano solemos usarlos con frecuencia para hacer guarnición para el gazpacho y es muy útil tener media docena en el frigorífico, ya fríos. Si disponemos de estos dos ingredientes ya cocinados y fríos, montar esta ensalada es cuestión de minutos. Vamos, que este plato es una buena solución para un plato veraniego que no nos lleve mucho trabajo, pero nos dé todos los elementos nutritivos que necesitamos.